De la descolonización al “nuevo orden mundial”
En el primer episodio relacionado con el 70 aniversario de las Naciones Unidas repasamos los orígenes así como la naturaleza de los primeros años desde su composición. En esta ocasión nos adentraremos en una etapa en la que la Organización mundial tuvo ante sí el reto de dar cabida en su sistema, a un crisol de naciones que iban naciendo tras la independencia frente a los países colonizadores. También hablaremos del papel de la Comunidad de Naciones durante la Guerra Fría, el cambio que sufrió ésta tras la caída del Muro de Berlín y concluiremos con los Objetivos Desarrollo del Milenio y Objetivos Desarrollo Sostenible.
Se trata principalmente de hechos que se consumaron en la década de los sesenta. Es además, uno de los hitos más importantes en la historia reciente de la Comunidad de Naciones, pues la emancipación afro-asiática sin una entidad como la ONU, hubiese resultado más violenta.
Del examen de la actuación de la ONU durante la descolonización se puede deducir la trascendencia de su labor en el encauzamiento y solución de numerosos problemas planteados por el fenómeno de la desintegración colonial y la gran deuda de gratitud que hacia la Organización han contraído, no ya los pueblos emancipados, sino todas las naciones amantes de la paz.
La muerte del Secretario General Dag Hammarskjöld , un acérrimo pacifista producida en 1961 como consecuencia de que su avión se estrellase debido a su intención de mediar en el conflicto del Congo, hizo que la Asamblea General nombrase al birmano U Thant como nuevo Secretario General. Los principales hitos del nuevo mandatario, fueron a través del proceso descolonizador con resoluciones como el envío de fuerzas de paz, la imposición de embargo de armas, sanciones, etc.
Antes de que U Thant fuese sustituido por el austríaco Kurt Waldheim, el birmano pronunció un sonoro discurso en el cual mostraba las luces y sombras de la Organización mundial. Bajo el mandato de Waldheim se celebró en Estocolmo el Congreso de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente, que lleva a la creación del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), con sede en Nairobi. También trató de mediar en varios conflictos internacionales, como por ejemplo con los gobiernos de la India, Pakistán y Bangladesh los problemas creados por la guerra entre la India y Pakistán y los medios y arbitrios para superar sus consecuencias.
En la década de los ochenta la Guerra Fría entra en su fase terminal con el inminente colapso del Bloque Soviético. En ese contexto, tras ser reelegido como secretario general en 1986, utilizó hábilmente la diplomacia para lograr el «alto al fuego», que puso fin a la Guerra Irano-iraquí.
La caída del Muro de Berlín y el fin del bloque oriental evidenciaron el ocaso del mundo bipolar. Frente a esta situación se abria un nuevo escenario indefinido, en el que algunos pretendieron ver el fin de los conflictos bajo la hegemonía de Estados Unidos como guardianes de la paz.
Pero la realidad mostraba tensiones Norte-Sur, acrecentadas en las últimas décadas, y la hegemonía estadounidense, no como una garantía para la paz, sino para sus intereses. Frente a esta situación la ONU permanecía inoperante por el poder de veto en el Consejo de Seguridad. En ese contexto de 1993 se trazan estas cuestiones y de un modo bastante premonitorio se anuncian algunos de los acontecimientos que hemos conocido en los últimos años.
Se suponía que en el nuevo orden mundial la ONU jugaría un papel importante después de salir de su relativa parálisis de la Guerra Fría. Se hablaba así de un sistema de seguridad liderado por la ONU, que reprimiría cualquier agresión contra la paz internacional.
Fue ésta la imagen que se trató de transmitir en la Guerra del Golfo, en la que el ejército estadounidense atacó a Irak, con el apoyo simbólico de algunas unidades de otros países, bajo el amparo de Naciones Unidas. Sin embargo, Estados Unidos lo hizo no contra las violaciones de paz, sino en defensa de sus intereses políticos, estratégicos o económicos.
Uno de los esfuerzos más grandes fue la denominada Cumbre del Milenio del año 2000 en el que las Naciones Unidas trataron de impulsar los Objetivos de Desarrollo del Milenio hasta el año 2015. Una serie de compromisos para tratan de reducir las desigualdades existentes en el mundo.
Los ODS son herederos de los ODM del año 2000. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son, quizás, la aspiración de las Naciones Unidas por tratar de hacer un mundo más justo y sostenible.