Un total de 2.121 jóvenes consiguieron empleo el año pasado gracias al Programa Integral de Cualificación y Empleo (PICE) de la Cámara de Comercio de España, desarrollado a través de la red de Cámaras de Comercio territoriales. El programa ofrece formación a jóvenes de entre 16 y 29 años que no estudian ni trabajan y se han inscrito previamente en el Sistema Nacional de Garantía Juvenil. El PICE cuenta con financiación del Fondo Social Europeo. Por comunidades autónomas, el mayor número de inserciones corresponde a la Comunidad Valenciana (609), seguida de Andalucía (429) y Castilla-La Mancha (291).
Las empresas adscritas al Programa PICE reciben una ayuda a la contratación de los jóvenes que han completado la fase de orientación vocacional, el primer paso para mejorar las aptitudes profesionales. Esta ayuda es de 4.950 euros y se extiende a cualquiera de las modalidades de contratación previstas en la ley: indefinido, temporal, en prácticas o para la formación y el aprendizaje.
Asimismo, existen ayudas para emprendedores con el objetivo de fomentar el autoempleo, de forma que los jóvenes beneficiarios del Sistema Nacional de Garantía Juvenil que hayan pasado por el PICE y pongan en marcha una actividad empresarial o profesional reciben una ayuda de 1.800 euros. Durante 2017, un total 23.735 personas se inscribieron en el programa PICE, de los que 21.242 recibieron orientación vocacional, 12.437 realizaron la formación troncal y los 10.266 restantes completaron la formación específica.
Plan de movilidad
Además, durante 2017 se puso en marcha el Plan de Movilidad del PICE, un programa que facilita la realización de prácticas laborales en países de la Unión Europea. El plan permite mejorar las competencias lingüísticas, desarrollar las capacidades profesionales y personales y mejorar la empleabilidad. Hasta la fecha 37 jóvenes han realizado ya prácticas en el extranjero a través de este plan.
Más de 70.000 inscritos desde 2015
El Programa PICE está diseñado a medida de las necesidades de los jóvenes y de las más 3.100 empresas adheridas al mismo, que pertenecen a sectores como la hostelería, el comercio o la industria manufacturera. Desde su lanzamiento en 2015, 71.963 jóvenes se han inscrito en el programa PICE, 60.572 de ellos han recibido la formación básica a través de la orientación vocacional, 30.636 han continuado con la formación troncal y 23.807 han realizado los cursos de formación específica. Cerca de 3.000 jóvenes (2.768) han accedido al mercado laboral.
El plan consta de dos planes específicos, el de Movilidad, que permite ampliar la capacitación profesional en empresas de países de la Unión Europea; y el de Capacitación, un itinerario formativo que prepara a los jóvenes para su inserción en el mundo laboral. Dicho itinerario comienza con la orientación vocacional, en la que los alumnos aprenden a elaborar su currículum vitae o afrontar una entrevista de trabajo. Posteriormente se imparte una formación troncal (idiomas, competencias digitales o habilidades para el empleo) y se ofrece una formación específica orientada a un puesto de trabajo o profesión específica.