El 27,5% de los trabajadores españoles (más de 5,3 millones de ocupados) se plantea cambiar su puesto de trabajo a la vuelta de sus vacaciones, según se desprende de un estudio realizado por Randstad para conocer las inquietudes de los profesionales tras el periodo estival.
En concreto, el estudio revela que los ocupados con un mayor nivel formativo son los que tienen mayor intención de cambiar de trabajo a la vuelta de las vacaciones. Así, un 36,7% de los trabajadores con estudios superiores se propone cambiar de puesto de trabajo después de las vacaciones de verano. De ellos, un 13,3% asegura estar buscando ya un nuevo puesto.
Por el contrario, cuando el nivel de formación desciende, también cae el número de trabajadores que quiere cambiar de empleo. Concretamente, uno de cada cinco trabajadores (20,4%) con educación secundaria o inferior afirma querer cambiar de empleo, mientras que el porcentaje crece hasta el 27,1% en el caso de los profesionales que solo tienen bachillerato.
Por edad, los mayores de 45 años son los que más se plantean cambiar de empleo tras su reincorporación. De hecho, un 20,2% ya se lo está planteando. A este grupo de edad le siguen los que tienen entre 25 y 45 años, ya que un 27,2% se plantea cambiar de empleo. Por el contrario, los menores de 25 años son los que menos intención tienen de cambiar de puesto tras las vacaciones.
Por otro lado, el estudio señala que el 45% de los trabajadores estarían dispuestos a mudarse de localidad para acceder a un nuevo empleo. En este caso, los jóvenes son los que muestran una mayor predisposición a cambiar de ciudad (58,1%). Los principales motivos que motivarían este cambio de ciudad son un mejor salario, según el 58,6% de los encuestados; un mayor equilibrio entre la vida personal y laboral (47,1%), más oportunidades de promoción (41,8%), mayor seguridad laboral (37,8%) y mayores opciones de flexibilidad laboral (21,5%).
No obstante, los trabajadores se muestran «más reticentes» a cambiar de trabajo si eso requiere cruzar la frontera y trabajar en otro país. Así, uno de cada tres ocupados (30,6%) reconoce que cambiaría de país para encontrar otro empleo al volver de sus vacaciones. Los menores de 25 años vuelven a ser los más «dispuestos» a este cambio. De hecho, un 45,4% afirma que se iría para encontrar un puesto de trabajo en otro país si se mejorasen sus condiciones actuales. En este caso, valorarían aun más el salario, ya que sería determinante para el 70,4% de los trabajadores. Los motivos más importantes para realizar este cambio, a parte del empleo, son las oportunidades de promoción profesional y una mejor conciliación.