Las secciones juveniles de UGT y CC OO critican la excesiva precariedad de los contratos, mientras ponen el foco en las nuevas relaciones laborales que están surgiendo en las plataformas digitales

Los sindicatos acumulan una larga trayectoria de lucha en defensa de los derechos de los trabajadores. A ellos se deben, en buena medida, los beneficios de los que disfruta la clase trabajadora en un mercado laboral que durante la última crisis ha afrontado cambios que han perjudicado especialmente a los jóvenes. Este colectivo precisamente el día a día de UGT y CC OO, cuyas secciones juveniles cuentan con miles de afiliados que ven en estas organizaciones una esperanza en unos tiempos que contemplan con más sombras que luces. «Los jóvenes son parte activa. Abren debates, nos traen propuestas… Nosotros tenemos la necesidad de darles cabida, de escucharles y de canalizar sus problemas para buscar soluciones y propiciar los cambios. La juventud que se afilia y sale a la calle a reivindicar sus derechos es porque quiere convertirse en motor de cambio de nuestra sociedad». Eduardo Magaldi, responsable de UGT Juventud, que desde 2008 ha vivido un incremento constante en el número de afiliados hasta alcanzar los 80.000, explica que este departamento confederal desarrolla un sinfín de actividades repartidas en las áreas de Empleo y desempleo, Acción sindical, Salud laboral, Formación sindical y Representación institucional.

Eduardo Magaldi

En CC OO constatan igualmente que la curva del número de afiliados menores de 30 años ha tomado una dirección ascendente. «Nuestro gran reto es construir espacios de organización juvenil que sean atractivos también para aquellos que viven más descarnadamente la precaridad laboral y para quienes se encuentran todavía impartiendo algún programa de estudios», asegura Carlos Gutiérrez, secretario de Juventud y Nuevas Realidades del Trabajo. Dentro de la organización sindical, añade que aspiran a «transversalizar las preocupaciones y los anhelos de la juventud en todas las responsabilidades que existen en la confederación».

La acción sindical se centra en la extirpación del desempleo y la precariedad, que tienen como resultado «una falta de autonomía que impide el desarrollo de un proyecto de vida a medio y largo plazo y una inserción social normalizada», enfatiza Gutiérrez. Y es que conceptos como precariedad, muchas veces responsable de la siniestralidad laboral, igualdad o discriminación aparecen entre los grandes caballos de batalla de ambos sindicatos, los más representativos de España.

El objetivo de reducir las tasas de paro se combina con la vigilancia de las condiciones de quienes ya disfrutan de un contrato. Desde estas organizaciones se alerta de la precariedad en la que viven instalados miles de jóvenes, principales víctimas de las sucesivas reformas laborales aprobadas en los últimos años. Una realidad a la que tampoco parece que vayan a poner fin las nuevas plataformas digitales de economía colaborativa como Deliveroo, Uber, Glovo… Estos entornos están ahora en el punto de mira de los representantes de los trabajadores. CC OO ha puesto en marcha una estrategia para proporcionar cobertura a estos empleados. «Son fenómenos todavía incipientes, sin mucha implantación y numéricamente aún reducidos, pero tienen un gran potencial de crecimiento. El problema es que construyen un modelo de relación entre la empresa y los trabajadores que desborda y erosiona el Derecho de Trabajo, estableciendo una relación mercantil que, a nuestro juicio, es un fraude de ley», sostiene el secretario de Juventud y Nuevas Realidades del Trabajo de CC OO. En UGT, la lucha por los derechos de los denominados ‘riders’ les ha llevado a crear una web específica con la que dan soporte legal a quienes trabajan en empresas digitales.

Carlos Gutiérrez

Trabajo en Europa

Al igual que Internet, los problemas de los trabajadores no distinguen fronteras. Por eso, UGT y CC OO participan en los foros, conferencias y reuniones del Área Joven de la Confederación Europea de Sindicatos, donde se comparten inquietudes acciones y propuestas. «Aunque las cifras de cada país y la manera de dar respuestas a los problemas son diferentes, las problemáticas son muy similares», afirma Eduardo Magaldi. «Las causas desbordan los espacios nacionales», coincide Carlos Gutiérrez.

Un ejemplo de esta colaboración europea es un proyecto que UGT Juventud está desarrollando junto con organizaciones de otros países en el marco de Erasmus+. «El proyecto pretende concienciar a la sociedad sobre el trabajo precario y la importancia del trabajo decente, proponiendo acciones y medidas para desarrollar políticas que garanticen un trabajo decente a los jóvenes«, apunta Magaldi. Esta iniciativa se encarga de analizar los retos a los que la juventud se enfrenta en el mercado laboral. «El objetivo principal es apoyar y guiar a los jóvenes en la transición de la vida académica a la profesional, ya que muchos de ellos carecen de los conocimientos necesarios sobre sus derechos».


PRINCIPALES PROPUESTAS SINDICALES

CC OO

-Empleo de calidad: No se puede asumir que España tenga tasas de temporalidad desorbitadas que sitúan a la juventud en una posición de inseguridad permanente, impiden la formación continua, conllevan menores salarios y dificultan el acceso a la protección social.

-Reducción de las tasas de trabajos con jornada parcial involuntaria: Esta cuestión es central si queremos combatir la pobreza y la exclusión social.

-Introducción de cláusulas en los convenios colectivos para el control de este colectivo: Hemos publicado una guía para orientar una acción sindical en las empresas porque no asumimos que la inserción en el mercado laboral de muchos jóvenes tenga que producirse de manera precaria y totalmente desregulada.

-Modificación del marco actual de las prácticas no laborales: Aquellas que tienen vinculación con un programa de estudios deben tener un marco de calidad que contemple un apoyo económico para el estudiante, garantice la tutorización y limite el numero de becarios por el tamaño de empresa. Para el resto, las extracurriculares, queremos que pasen a ser una relación laboral.

-Reorientación del programa de Garantía Juvenil: Se debería enfocar hacia aquellos jóvenes que carecen de formación articulando un apoyo económico para que puedan realizar un programa formativo que les permita acceder a empleos de calidad. Asimismo, creemos que se deberían fortalecer los servicios públicos de empleo en la dirección de contratar a orientadores que puedan ayudar a la inserción de la juventud o orientar en la realización de programas formativos.

UGT

-Regular las prácticas no laborales: Vincularlas siempre a un programa de formación y con una duración proporcional a la duración y realidad del plan de estudios correspondiente; derogar el real decreto por el que se regulan las prácticas no laborales en empresas para jóvenes con titulación oficial, darles carácter laboral a través del contrato en prácticas; y acordar un ‘Estatuto del Becario’ que regule los derechos y deberes de los contratos en prácticas no laborales curriculares.

-Realizar una actuación prioritaria para jóvenes sin cualificación profesional: Para aquellas personas sin cualificación y con mayor riesgo de exclusión, itinerarios formativos asociados a una ayuda económica que incentive la realización y finalización de la formación y evite el abandono.

-Revisar la regulación del contrato para la formación y el aprendizaje: Hay que establecer mayores garantías de la finalidad formativa e impedir el uso abusivo de esta modalidad, mediante el establecimiento de un sistema de control y penalización a las empresas que abusen de esta modalidad y mejorar las condiciones, derechos y garantías de los contratos suscritos.